La primera novela de María Martínez.
No hay magia más poderosa que el amor.
Una novela fascinante sobre el poder del pasado y la fuerza del destino.
Cuando su madre muere en un terrible accidente de tráfico, la vida de Abby cambia por completo. Acogida por un hombre misterioso que dice ser su padre, se instala en el pueblo de Lostwick, en el sur de Maine, y cree haber encontrado la vida que tanto había deseado: ahora tiene amigos, familia y un lugar al que pertenecer.
Pero este nuevo mundo quizá no es tan idílico como Abby cree. Hay algo en quienes la rodean que le hace desconfiar, la atormentan terribles pesadillas y esa sensación de sentirse observada amenaza con volverla loca. El peligro está aterradoramente cerca y acecha como la sombra de un cuervo en la oscuridad.
Todo parece girar en torno al atractivo e irritante Nathan, un chico enigmático junto al que tendrá que descubrir la verdad de lo que sucede, confrontar el pasado y enfrentarse a un destino implacable que viene a cobrarse promesas hechas siglos atrás.